“Es cosa sabida que la humildad es una escala de la ambición incipiente, a la que vuelve el rostro el trepador; pero una vez en el peldaño más alto, da entonces la espalda a la escala, tiende la vista a las nubes y desdeña los humildes escalones que le encumbraron.” (Bruto)
Condenarro
Por acá de nuevo mi es_timada(o) lectora(or), nomás debrayando, toreando olas urbanas en un puerto en el que el mar se esconde ente obras de lujo, inaccesibles al pópulo, poco, muy poco más que las playas colindantes, que suponemos nuestras por nimiedades como la Constitución Política del país, y que la generosidad de hoteleros, nacionales, extranjeros, cadeneros y lo que aparezca, los protegen de gentes simples y “de a pie”.
En ésta ocasión y no tan desfasado, pero si un poco retrasado, comentaré sobre una circunstancia, entre muschingo más, que se vive y padece en la zona de El Médano, y se relaciona con la entrevista que Eclipse le hizo a Arturo Rubio Ruíz diez días atrás, situación que, en lo personal, lo percibo como un claro ejemplo del agandalle. El abogado, en la entrevista plantea dos irregularidades que se podrían considerar delitos, uno de ellos, ambiental, y el segundo, apropiación y explotación de un bien público, que el mismo desarrollador comprometió y nunca entregó al Ayuntamiento y que es objeto de aprovechamiento en beneficio propio; algo que el litigante nos explicó como un peculado impropio, que se diferencia del peculado en el hecho que es un particular quien administra un bien público para beneficio propio.
Pero no se me agote mi es_timada(o), ambas situaciones se dan en el mismo inmueble, ese que ocupa casi el total de la manzana entre el andador de El Médano y calle Pelícanos y entre Paseo del Pescador y calle Cormoranes, con acceso a la playa, predio que si mal no recuerdo empezó a construirse a finales de los 90.
Y por obvias razones, llegó a transformar, por no decir destrozar y restringir ese bonito andador, propiedad municipal.
La primera, que es una denuncia ambiental se refiere a la existencia de pozos de absorción, construidos para recibir el agua de desagüe proveniente del área común, alberca del hotel, área que es objeto de constante limpieza a base de químicos, los cuales se desaguan directamente a los pozos mencionados y que a su vez se trasladan a la playa adyacente, lo cual significa severa contaminación al subsuelo de playa, en una zona de anidación de tortugas.
Irónicamente, el hotel se regodea con ser parte de “La red tortuguera de Los Cabos”. Y también, los aseados empresarios y gerente del hotel, en no pocas ocasiones “donan” sus aguas residuales para el aseo del andador… ellos creen, creo yo. Independientemente de que la obra de construcción de los señalados pozos, se hicieron sin pedir perdón ni mucho menos permiso. Al modo.
En torno al segundo asuntillo, que no es menor de modo alguno, hemos de señalar que el hotel ha incumplido. En 1999, cabildo aprobó en sesión solemne de cabildo el proyecto Médano Beach Club, la razón social ha cambiado en éstos casi 23 años, los escépticos y algunos contadores dicen que eso se hace por motivos fiscales… evasión pues.
El proyecto es actualizado en octubre de 2005, certificado por notario público mediante la Certificación 053-IX-2005; el acuerdo al que se refiere destaca que se respeta el punto de acuerdo del acta N° 18 del 26/XI/1999, se acepta la modificación señalada en 2005 mediante algunas condicionantes: pavimentación de las tres calles circundantes, construcción y habilitación de un estacionamiento púbico con 52 cajones dentro del proyecto y la construcción de un aula. Se pavimentó y se construyó un aula en la primaria Arturo Guerrero. El estacionamiento, que daría sus ganancias a instituciones como Bomberos y/o Cruz Roja sí se construyó, se habilitó y se usa… sólo que las ganancias se quedan en el hotel, Bomberos, Cruz Roja y/u otra institución de beneficencia como los chinitos “nomasmilando”.
Al parecer los síndicos y la síndica que han “prestado sus servicios”, de acuerdo a la ley orgánica municipal, de cuidar la hacienda y patrimonio municipal, públicamente se hacen los tíos Lolos. Nunca se sabe los alcances de una nutrida y espontánea “donación”, en el bolsillo indicado…
Siento que exponer la comidota que les dieron a las dimensiones originales del andador puede ser objeto de otra columna, al igual que lo que esperamos de unos baños que se construyeron a una cuadrita de ahí y que, a dos años, esperan poder ser utilizados y otras nimiedades que conocemos a lo largo de la playa El Médano o De los corsarios y que abarca desde la escollera hasta las piedras de Cabeza de Ballena.
En vista de que la ola de este debralle pasó ya el punto de quiebre, yo, sudando, paso a refrescarme aquí, donde el buen litigante, fuente de tan interesante información, dona su tiempo libre y desarrolla su arduo y desinteresado trabajo de juez de concursos propios de la zona de playa, me retiro y reitero con la intensión de aprender, como un simple y pobre loco peligroso irreverente, irrelevante, irremediable pero irresistible y real prófugo de la injusticia que el olvido de un acuerdo me manda a estacionarme hasta la…
“Pocas o ninguna vez se cumple con la ambición que no sea con daño de tercero.” (Miguel de Cervantes)