Marilú Sánchez  

Los Cabos.- Y resulta que desarrolladores se han apropiado  del  30 por ciento de playa Palmilla, espacio recreativo natural más tradicional de la zona que le ha sido arrebatado a los cabeños. 

El Club de Playa que se encuentra en el lugar ha puesto camastros muy cerca de la playa, espacio que ha sido privatizado de manera premeditada y alevosa, quedando fuera del alcance del residente. 

Autoridades estatales se supone que revisarían la concesión, delimitación y autorizaciones de construcción, pero al parecer no hicieron nada por los cabeños, al contrario la zona está resguarde por seguridad privada. 

Blanca Pedrín, representante del lugar hizo el llamado al gobernador Víctor Castro, para que revise el caso ya que el derecho de los sudcalifornianos no puede quedar impune.