Por Califernia
Las abejas no solo hacen miel, hacen algo esencial para la diversidad de las plantas en el mundo: la polinización. Su preservación y la de su hábitat nos beneficia a todos.
Las abejas necesitan visitar dos millones de flores y viajar 80 000 kilómetros que es lo mismo que darle la vuelta al mundo dos veces para recolectar dos kilos de miel.
En los climas templados, durante el verano las abejas requieren aproximadamente 3 litros de agua limpia al día por colmena, es por ello que los apiarios deben ubicarse en sitios con fuentes naturales de agua como manantiales, ríos, etc